Un retinoscopio es un instrumento utilizado por un optometrista u oftalmólogo para evaluar el rango de error de refracción en los ojos como parte de un examen óptico integral.
El dispositivo pasa un haz de luz directamente en el ojo del paciente mientras que él o ella ve un objeto distante, que permite al médico examinar cómo la luz se refleja fuera de la retina.
El grado de refracción se indica por el campo de visión en la que los puntos de imagen de la luz ya no convergen y se pierde enfoque preciso. En la jerga de la óptica geométrica, esto se conoce como el círculo de confusión, el círculo de desenfoque, o el efecto de sombra.
Un retinoscopio también le dice al médico qué tipo de corrección visual es necesaria en función de si el error de refracción es esférica o cilíndrica. Diagnosticando Ametropías.